Como todos sabemos, nuestros dientes no tienen un recambio natural, una vez se caen los dientes de leche, nuestros dientes son para siempre y con más motivo debemos cuidarlos con una buena higiene y unos hábitos saludables.
Hasta principios del siglo XX no se conocían las pastas dentales ni los enjuagues bucales. De hecho era común comer una manzana cruda antes de ir a dormir, dado que existía el convencimiento de que era un método que resultaba beneficioso para mantener unas encías y dientes sanos. Ahora sabemos que en parte esto es así, por el ácido málico que contiene la manzana, que limpia y favorece una flora bucal sana.
Para mantener una salud bucodental saludable, existen actualmente los colutorios y pastas dentales químicos, o bien, las pastas dentales y enjuagues bucales a base de plantas medicinales y sin aditivos químicos, que resultan ser una buena alternativa.
Entre las plantas medicinales que favorecen una dentadura saludable encontramos:
- Salvia: Actúa inhibiendo la inflamación de las encías.
- Romero y menta: Ejercen un efecto refrescante bucal, a la vez que ayudan a combatir el mal aliento. Ambas plantas además, actúan como antisépticas bucales y protectoras de las encías.
- Té verde y arándanos: Por su contenido en polifenoles (antioxidantes), protegen los dientes y las encías, previniendo del posible crecimiento de los gérmenes responsables de afecciones bucodentales.
Finalmente recordemos que, va a ser muy importante utilizar un cepillo adecuado y cambiarlo cada 3 meses. Al igual que consideraremos los alimentos y bebidas que consumimos, puesto que influyen directamente en nuestra salud bucal. Por ello será importante la reducción de azúcares refinados, dulces y bebidas edulcoradas o alcohólicas que influyen de forma negativa en nuestra dentadura.