Sus propiedades medicinales se deben a su contenido en gingerol, shogaol y zingerona que se encuentran en el rizoma.
Actúa como poderoso antiinflamatorio y antioxidante, ejerciendo un efecto anticancerígeno e inhibe la angiogénesis. Una infusión de jengibre sirve para aliviar las náuseas provocadas por la quimioterapia y la radioterapia. Además, el jengibre resulta muy indicado para prevenir los mareos y las náuseas propias del embarazo.
Es un gran tónico circulatorio, estimulante digestivo y combate las flatulencias. Asimismo, ayuda en procesos catarrales y gripales, además de ejercer un leve efecto broncodilatador. Y actúa como antirreumático, aportando calor interno e indicado como coadyuvate en trastornos locomotores degenerativos, como por ej. artrosis.
Precauciones:
Mejor
no administrar en caso de tomar sintrom (acenocumarol), puede
bloquear la molécula y provocar descompensaciones.